En una visita estos dias a Portonovo, fuimos a cenar al restaurante Ollo de Boi y la esperiencia fue tan mala que en los años que llevo sobre la tierra nunca me habia levantado de la mesa antes de acabar y este restaurante logro ser el primero.Desde la llegada la impresion fue negativa pues estaban en el bar discutiendo entre si los trabajadores, pedimos bogavante frito con huevos,le preguntamos el peso y nos dice que kilo con 50 gramos(precio 95 euros kilo),cuando nos lo traen ,madre habia encogido,seguro por la coccion a unos 500 aprox.Avisamos y ponen a mi mujer de vuelta y media.Pido la cuenta y dicen que estamos invitados,las once de la noche y sin cenar.