Daniel Kahneman, psicólogo que recibó el premio Nobel en 2002, nos explica muy bien en su fabuloso libro "Pensar rápido, pensar despacio" como el ser humano sobredimensiona los riesgos, como hace todo cuando está a su alcance para minimizarlos y como la gran mayoría de las veces no actúa racionalmente si no emocialmente pues lo que buscamos es nuestra tranquilidad. Como consecuencia de esta nuestra forma de proceder se frotan las manos las compañías aseguradoras, por poner solo un ejemplo. Otra consecuencia es que nos atemorizamos y vemos peligros por todas partes y rápidamente nos creemos todo aquello que nos digan y que a la vez nos proporcione seguridad, incluso aunque sea una marca comercial la que está detrás de los "consejos."
Dicha la parrafada anterior, quiero comentar mi caso. Fue en 1992 cuando adquirí un Audi 80 TDI que aún conservo y utilizamos en casa casi a diario. Desde el primer día no ha visto otro gasoil que el normal y después de casi ya 24 años y más de 500.000 km ese motor no ha dado nunca ni un problema. Razón por la cual aún circula y no hemos tirado con el. Ahora en el A4 B8 llevo 130.000 km, igualmente con gasoil normal y ese motor va como un reloj suizo.
Un saludo