Supongo que todos hemos vivido alguna vez situaciones similares...
A mí hace ya 3 años que se me escapó una amiga de 21 añitos en un accidente de tráfico. De la forma más tonta, yendo con un chaval que se creía Alonso.
Vacilando de 206 CC y entrando en una rotonda... se la comió. Ella iba detrás, no llevaba cinturón porque estaban en una moraga en la playa y sólo habían ido a una gasolinera que estaba a un kilómetro a por hielo.
El destino está donde menos lo esperamos... y su novio se quedó en la moraga. Imaginad su cara cuando vio que empezaba a tardar y cuando, más tarde, lo llamaron al móvil.
Era una familia felicísima. Desde entonces las cosas nunca son como antes para ellos.
Lo dicho, lo importante de perder uno la vida es la herida que deja en los demás más que la muerte de uno mismo que, en el fondo, no se entera de nada.
Animo Nerea... Hay que seguir viviendo :blink: