Ahora mismo subo de cambiarle el parasol del acompañante por el clásico mal endémico de la luz de cortesía, que por el clor que desprende hace que el recubrimidento del parasol se encoja y quede la espuma a la vista. (Luego dejo unas fotos.)
La verdad que subo un poco triste por que aunque el coche a ojos de cualquier esté genial, me queda un largo camino para llegar hasta donde queremos. Hasta parece que me falta tiempo en esta vida para poder dedicarselo al coche... pintar, desmontar por completo el interior y volver a montar minuciosamente, desmontar todos los bajos, limpieza a fondo y volver a montar, y un largo etcetera. (Ciertamente todo sería más facil si tuvieramos un lugar acondicionado para tabajar más cerca de casa)
Bueno, poco a poco y mientras a seguir disfrutando del coche día a día sin darle muchas palizas.
S2!