Esa reacción la llamamos “reacción del cartero” y se produce cuando el animal, todavía joven, pasa grandes espacios de tiempo solo y tiene que hecer frente a sus miedos ante extraños que él interpreta que pueden ser potencialmente peligrosos.
La secuencia es la que sigue:
1.- Un extraño -por ejemplo el cartero- se aproxima a sus dominios a dejarte la correspondencia.
2.- El perro lo ve como una amenaza y ante el miedo, opta por ladrarle.
3.- El cartero, ajeno a ello, deja la correspondencia y se marcha.
4.- El perro ve la huida del cartero como un logro de su estrategia de ladrarle.
5.- El perro repetirá una y otra vez la estrategia del ladrido porque cree que lo que auyenta a los extraños es su ladrido, y no el hecho de que los extraños simplemente marchan por cualquier otra causa.
Espero haberte ayudado a comprenderlo. El hecho de crear una conducta y repetirla, demuestra la inteligencia del perro, y la repetición de conductas es utilizada comunmente por otras especies, incluída la nuestra.