Jump to content

Publicaciones recomendadas

Publicado

;) Es un artículo publicado por la revista época... de flipar :D:D

 

 

La ONCE se queda con su propia suerte

Los directivos de la ONCE ponen en el mercado entre un 40% y un 60% más de los cupones que van a vender para quedarse con una parte importante de los premios. Con ello consiguen presentar unos premios más elevados que muchas veces tocan a la propia ONCE, cuando el boleto premiado es uno de los no vendidos.

 

El control de la sobreemisión -por lo que parece, mucho más teórico que práctico- corresponde a la Comisión de Vigilancia de la ONCE, que depende del Ministerio de Trabajo. En este año 2004, la ONCE se embolsará más de 560 millones de euros en premios no vendidos.

 

Las actuales prácticas de la ONCE, que consisten en emitir mucho más cupón del que venden, arrancan del acuerdo suscrito en marzo de 1999 con el entonces ministro de Trabajo, Manuel Pimentel, que modificaba sustancialmente -y de modo imperceptible para el público- el sistema de premios de la ONCE.

 

Lo que hasta entonces se exigía repartir, un mínimo del 47,5% de lo recaudado para los sorteos de lunes a jueves y un 52% para el cuponazo del viernes, pasó a no tener un mínimo establecido, sino un tope máximo de reparto en premios del 55% de la recaudación (el cambio aparece en el párrafo decimoséptimo, punto cinco). Eso abrió la puerta a la sobreemisión de cupones.

 

Este planteamiento fue inalterado por posteriores acuerdos de la ONCE con Trabajo, en la época del ministro Eduardo Zaplana y ahora por el titular socialista, Jesús Caldera.

 

Pimentel dejó de ser ministro de Trabajo el 19 de febrero de 2000. Unos meses después, se incorporó al grupo Detea, en el que fue consejero, después consejero delegado y, finalmente, vicepresidente hasta el pasado 3 de mayo. A este grupo pertenece la sociedad Aggraria Siglo XXI, que firmó un contrato de gestión de las fincas El Río, que la ONCE posee en Extremadura y Córdoba, con una superficie de más de 4.000 hectáreas. ¿Casualidad?

 

La ONCE da en cada sorteo un premio gordo que, de lunes a jueves, es de 300.000 euros, además de premios menores a las cinco cifras que se pagan a razón de 30.000 euros. El cuponazo de los viernes es de unos teóricos 6 millones de euros, mientras que el sorteo de los domingos publicita un premio mayor de 2,5 millones de euros y los sorteos extraordinarios ofrecen un premio superior a 10 millones de euros. Por ejemplo, el último sorteo extraordinario (14 de agosto) fue de 14 millones de euros.

 

Tras el acuerdo con Pimentel, la dirección de la ONCE optó por emitir muchas más series, muchos más cupones de los que se venden y de un razonable margen excedente de éstos, que según los manuales de loterías de este tipo nunca debiera superar el 10% de lo realmente vendido.

 

En los sorteos de lunes a viernes, se emiten 6 millones de cupones y se venden menos de 3,6 millones, con lo que los vendidos sólo significan menos del 60% de los que entran cada noche en el sorteo, de forma que, inexorablemente, más del 40% de las veces, estos premios tocan a la propia ONCE.

 

Alto porcentaje de sobreemisión

En los sorteos del "cuponazo" del viernes se emiten 12 millones de cupones y se venden menos de 7,5 millones, con lo que -en este caso- la sobreemisión está entre el 38 y un 40% de lo vendido. Por lo que respecta a los sorteos de los domingos, se emiten 5 millones de cupones y se venden poco más de 2 millones. Alcanza cuotas incluso superiores al 50%, según datos de ventas y emisiones de cupones en diversos meses de 2003, a los que ha tenido acceso ÉPOCA.

 

La ONCE juega con tres millones de posibilidades a su favor y todo el conjunto de compradores sólo dispone de dos millones de posibilidades ya que la sobreemisión es mayor. ¿Cómo hay que calificar entonces este juego?.

 

Las enormes diferencias entre lo emitido y lo vendido merman claramente las posibilidades del comprador del cupón. La dirección de la ONCE puede contar con un 40% o más de posibilidades de obtener el premio mayor y el resto de premios.

 

La sobreemisión evita que los premios lleguen al público comprador y frustran los deseos de los 23.000 vendedores callejeros de la organización (de los que 14.000 son ciegos), que preferirían repartir el máximo de premios y que en televisión y otros medios se diera a conocer diariamente dónde ha tocado el premio. Actualmente, con la política que practica la dirección de la ONCE, esto no es posible, ya que una gran parte de los días, al no haber ganador, no podría darse a conocer.

 

La sobreemisión convierte a la ONCE en un jugador de ventaja en sus propios sorteos. Esta práctica llevó a que, en 2003, la dirección de la ONCE lograse 119 premios mayores de un total de unos 300 sorteos producidos. Es decir, un 39,6% de los premios. Esta circunstancia fue contrastada por este semanario con la propia ONCE, quien prefiere no comentarla.

 

En el año 2004 -con datos hasta agosto- ha sucedido lo mismo, como refleja el cuadro adjunto en el que aparece el total mensual ingresado sólo por premios gordos no repartidos y puede apreciarse su espectacular magnitud. También se relacionan los números emitidos, no vendidos y premiados mes a mes. Esta circunstancia tampoco quiso ser comentada por la ONCE. [...]

 

Por Xavier Horcajo.

Más información en la revista Época.


Publicado

Pos yo lo que creo es que todos los españoles nos deberiamos de poner deacuerdo y comprar el maximo numero de cupones para los gordos para que a la ONCE le quede el minimo porcentaje o 0%.

Yo juego a la ONCE de vez en cuando porque por muy amañado que este el concurso, si no juego seguro que no me toca, y jugando, aunque pocas, tengo alguna posibilidad.

 

P.D.Yo ya lo imaginaba pero esque esto nome va a quitar el sueño. Se haga la cantidad que se haga yo solo voy a comprar uno, asi que tengo la misma posibilidad de que me toque, se quede ONCE con mas o con menos cupones.

Publicado (editado)
P.D.Yo ya lo imaginaba pero esque esto nome va a quitar el sueño. Se haga la cantidad que se haga yo solo voy a comprar uno, asi que tengo la misma posibilidad de que me toque, se quede ONCE con mas o con menos cupones.

Jeje, no hombre no, no lo has entendido.

 

Es como hacen la mayoría de Bingos, anuncian el número de cartones vendidos y el premio correspondiente mientras continuan vendiendo cartones (y la gente compra sin rechistar :D , yo casi me levanto un día que me llevaron unos amigos y me pongo a dar un mitin).

 

En este caso la Organización, que siempre ha mantenido el beneplacito interesado de los gobiernos de turno y que compite deslealmente en infinidad de negocios del país que no tienen que ver con los ciegos ni ninguna otra actividad "no gubernamental", emite muy por encima de la demanda para quedarse con los premios gordos en el 40% de las ocasiones. En cualquier otro país, una estafa (prueba a hacer una rifa vendiendo solo el 60% de los números emitidos, quedate tu con el premio si no sale un número vendido, y veras lo que tardas en ir a la carcel).

 

Si no pudiesen ajustar a la demanda, esta claro que deberían instalar un sistema de BOTES, como las apuestas del estado. Pero quedarse con la pasta de los premios es de un morro espectacular cuya impunidad solo se explica por gracia de la eterna "amistad" y los favores de la ONCE a traves de sus empresas y en especial de su capital y sus medios de comunicación a disposición del gobierno que mejor les sirva y que más discrimine al resto de colectivos minusvalidos y fundaciones serias del país con respecto a ellos.

Editado por Der_Jäger
Publicado (editado)
¿ dónde está el delito ? :D

En que si sabes que no vas a vender ni 100 boletos para participar en la subasta del jamon <_< , poner 1000 a la venta, con lo que las posibilidades de que toque a los solo 50 u 80 que compren se reduce muchisimo. Con lo que el que hace la subasta se queda con el dinero de la venta de los boletos y se come el jamón para celebrarlo :D

 

De todos modos no es delito. Tal y como expone rubencito® esto fue aprobado por el Ministro de turno. ;)

 

 

Pensando en montar uan rifa estas navidades? :lol::lol:

Editado por GhosTT
Publicado

Hola a todos,

El tema de la ONCE viene de largo, no sé si os acordáis del ciego que salía en Telecinco, Miguel Durán, Presidente de la ONCE hace unos años, pues acabó en la trena, y la investigación llevada a cabo casi cierra para siempre la Entidad, lo que pasa es que la extensa labor social y de integración que hacía y hace aún era un problema si se cerraba el chiringuito que tenían montado y tienen actualmente.

Si cierran esto,

 

¿Quien ayudaría a tanta gente con discapacidades fisicas y psíquicas?

¿Donde estaría el deporte paralímpico español?

 

Por esto y mucho más han permitido que la ONCE siga abierta, porque el gobierno no puede asumir todos esos costes que quedarían en el aire.

 

Un saludo, Gasbox

Publicado

Pues yo esto me lo imaginaba. Con tanto sorteo, re-sorteo, especiales, botes, sorteos extraordinarios, de ferias, etc.etc.etc. ¿Se creen acaso los de la ONCE que los españoles se pueden permitir gastarse 200 euros al mes en cupones? Pues no.

 

De modo que para mí esto ya cantaba, pero gracias al artículo que nos ha pasado rubencito, ya ha quedado patente la desvergüenza de esta organización "benéfica".

 

Sin ir más lejos, mi mujer tiene un 33% de minusvalía en la visión, con 17 dioptrías en cada ojo, campo de visión reducido, varias operaciones a sus espaldas por glaucoma congénito, y un largo etcétera.

 

Con estos datos documentados por escrito fue a intentar que la dieran un trabajo de profesora de inglés (es licenciada con título de profesora), y para probar que era "apta" para pertenecer a la ONCE, tenía que pagar más de 30 euros en la solicitud, que por supuesto repitieron más de 2 veces porque según ellos estaba en el límite de la admisión, pagando los correspondientes 30 euros por sesión.

 

Obviamente, no fue apta. Debe ser que para entrar en la ONCE hay que ser ciego 100% o tener un buen enchufe. Pero eso sí, se quedaron con los más de 100 euros por las "gestiones".

 

De todas formas, ¿qué os esperabais? Si vivimos en un país en el que la corrupción y las malas artes están a la orden del día. Una organización de discapacitados no es un grupo de amiguetes agil***ollaos con sueños de un mundo mejor y con ganas de ayudar al prójimo, son otra panda de sinvergüenzas con ganas de llenarse los bolsillos a costa de la gente trabajadora (que somos más del 90% de la población), que precisamente suelen ser los que menos dinero tienen.

 

Perdonad el sermón, pero a mí estos temas me hacen hervir la sangre :o

Unirse a la conversación

Puedes publicar ahora y registrarte más tarde. Si tienes una cuenta, conecta ahora para publicar con tu cuenta.

Guest
Responder a esta discusión...

×   Pegar como texto enriquecido.   Pegar como texto sin formato

  Sólo se permiten 75 emoji.

×   Tu enlace se ha incrustado automáticamente..   Mostrar como un enlace en su lugar

×   Se ha restaurado el contenido anterior.   Limpiar editor

×   No se pueden pegar imágenes directamente. Carga o inserta imágenes desde la URL.

  • Explorando recientemente   0 miembros

    • No hay usuarios registrados viendo esta página.