Opel Insignia 2017

[Ocio]

26-10-2016

 

 

 

 

A partir de mayo de 2017 habrá un nuevo Opel Insignia en los concesionarios. Respecto al Insignia 2014, será más grande por fuera, por dentro y tendrá un equipamiento mejorado. Desaparece una de las tres carrocerías existentes en la actualidad —la de cuatro puertas—, la de cinco estrena denominación —Grand Sport— y la familiar la mantiene —Sports Tourer—.

 

 

La gama inicial de motores será de 140 a 250 CV en el caso de los de gasolina y de 110 a 170 CV en los Diesel. Todos son de cuatro cilindros.

Hemos asistido a unas pruebas con dos versiones —con motores de gasolina de 165 y 250 CV— de este nuevo Insignia. Eran coches pre-serie, construidos en julio de 2016, con camuflaje exterior y elementos que ocultaban diversas partes de su interior. Por ello, gran parte de los plásticos de recubrimiento no eran los definitivos y había elementos que no estaban operativos. Lo interesante de esta sesión ha sido que hemos podido conducirlo y compararlo con las versiones equivalentes de la primera generación, la que aún se comercializa.

Opel ha desarrollado el Insignia 2017 sobre una nueva plataforma —denominada Epsilon 2—. Respecto a la anterior, la distancia del centro de las ruedas delanteras a la de las traseras es notablemente mayor (92 mm). La longitud del coche no se incrementa en la misma cantidad (55 mm), dado que ahora los voladizos, el delantero en particular, son más cortos (30 y 7 mm delantero y trasero, respectivamente).

 

 

 

 

 

 

Al sentarse al volante del nuevo Insignia, tras hacerlo en el otro, lo primero que se percibe es que el conductor puede ir sentado más bajo (según los datos que nos ha proporcionado Opel, 3 cm más). Yo me he sentido más a gusto con esta nueva configuración porque el volante me quedaba más alto y alejado de las piernas, y porque tampoco me ha parecido que sea más incómodo entrar y salir del coche.

El acceso a las plazas traseras ha sido mejorado por el nuevo diseño que tienen las puertas. No acaban en un pico tan sobresaliente y son un poco más altas en la zona por donde hay que pasar la cabeza. También creo que se nota la ganancia de espacio —que según Opel es de 25 mm para las piernas—, algo que comprobaremos cuando podamos medir una unidad de producción.

Hay dos tipos de cuadro de instrumentos, uno en el que Opel combina indicadores de aguja y una pantalla monocroma y otro que es una pantalla (de 8”) en su totalidad. Adicionalmente, y por vez primera en Opel, el Insignia podrá tener un sistema que proyecta información (en color) sobre el parabrisas (head up display). En el salpicadero hay otra pantalla, similar a la que tiene el Astra para el sistema multimedia y unos botones para manejar algunas funciones del mismo. El climatizador también se maneja mediante botones.

Se mantienen los buenos asientos delanteros que múltiples ajustes —sujeción lateral, amplitud de la banqueta—, calefactados, ventilados y con función de masaje en el caso del conductor. En las plazas traseras hay salidas del sistema de climatización al final de la consola y dos tomas de corriente USB.

 

 

Es nuevo Insignia es más ligero que antes (hasta 175 kg en el mejor de los casos, según Opel) pero eso no significa que ahora vaya a sobresalir en este aspecto dado que el Insignia 2014 es un coche pesado. No me ha dado la impresión, al menos en las condiciones en la que lo he probado, que la diferencia se perciba con claridad. Tampoco me ha parecido que haya una ganancia clara en confort, lo cual no es un demérito dado que el modelo anterior ya era bueno.

Sí existe una diferencia clara entre la suspensión normal y la que tiene unos amortiguadores regulados electrónicamente. La segunda me parece recomendable porque los ajustes posibles permiten tener un coche más cómodo que con la suspensión normal —si se selecciona el ajuste Tourer— o una carrocería más sujeta —si se selecciona el modo Sport—.

 

 

 

 

 

El motor de gasolina de 165 CV y 1,5 litros de cilindrada es una variación del ya existente de 1,4 litros. El de 250 CV tiene cambios no especificados.

Son novedad la caja de cambios manual de seis relaciones que puede tener el primero (en la que Opel ha trabajado para reducir las pérdidas por rozamientos) y el cambio automático del segundo. Este es de convertidor de par con ocho relaciones, está fabricado por Aisin y ajustado por Opel. Hace los cambios con suavidad pero no funciona con la misma rapidez que lo hace el de ZF (disponible en marcas como BMW o Jaguar), ni aun seleccionando el ajuste más deportivo. Esto último habrá gente a quien le pasará desapercibido pero seguramente haya quien espere otro tipo de gestión en un coche de 250 CV. De todos modos, la puesta a punto de las dos unidades que hemos conducido era diferente y posiblemente tampoco correspondan con la definitiva.

Tanto a mí como a otros periodistas nos ha parecido que el apoyabrazos de la consola molesta para seleccionar las marchas con el cambio manual (el codo golpea con él y hay que realizar un movimiento poco natural para utilizarlo). Quien se siente al volante en una posición elevada, subiendo la banqueta, posiblemente no se encuentre este inconveniente. También es nuevo el sistema de tracción total. Opel abandona el acoplamiento del eje trasero mediante un embrague multidisco y opta por un sistema nuevo en el que hay dos embragues que acoplan, en mayor o menor medida, cada una de las ruedas y que hacen las veces de diferencial trasero. Este sistema (desarrollado por GKN, similar al del Ford Focus RS) permite gestionar de manera independiente el par en cada rueda y utilizarlo para intervenir sobre la trayectoria del coche para conseguir un paso por curva más rápido. Las versiones con este sistema de tracción tienen una suspensión trasera distinta, con cinco brazos en vez de cuatro.

 

 

El sistema de faros led «IntelliLux» ha sido mejorado respecto al del Insignia anterior y también frente al Astra 2016. Tiene en cada faro dieciséis módulos de iluminación que se gestionan individualmente. De este modo, en cuanto la velocidad del coche supera los 55 km/h, se activan las luces largas y se produce al apagado selectivo de esos módulos para evitar deslumbrar a los conductores que hay delante. Por la cantidad y calidad de luz que dan, nos parecen una opción muy recomendable para quien use el coche de noche por zonas mal iluminadas.

 

 

 

 

 

 

 

 

 

FUENTE: http://www.km77.com/01/opel/insignia/2017/informacion-y-fotos-327901-p.html

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Opel Insignia 2 (2017) - Opels neue Mittelklasse

 

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New Opel Insignia OPC - Spy video: testing and sound on Nurburgring

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Opel Insignia / Renault Megane Sedan - barely disguise prototype - German Autobahn

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26/10/2016

 

 

 

 

 

A partir del próximo mes de mayo estará disponible el nuevo Opel Insignia Grand Sport, un modelo que se pone a dieta para ofrecer un comportamiento más atlético.

Aún faltan unos meses para que se ponga a la venta el nuevo buque insignia de Opel, que basa su estrategia en diseño, eficiencia y conectividad. También hereda algunos rasgos deportivos del Opel Monza Concept, que fue presentado en 2013.

 

 

Después de una historia de éxito, con más de 900.000 unidades producidas, llega el momento de relevar al veterano Opel Insignia, que lleva desde 2008 en el mercado y llegará a los concesionarios durante el mes de mayo próximo. Y la fórmula utilizada para la nueva edición es muy similar a la empleada recientemente en su hermano pequeño, el Opel Astra. Las claves se basan en la eficiencia, el diseño deportivo y la conectividad. Así, el nuevo Opel Insignia cuenta con un bastidor más ligero y resistente (basado en la nueva plataforma Epsilon 2, que logra ahorrar hasta 175 kg respecto a la anterior generación) y que ha permitido mejorar el espacio interior. También contribuye a este cometido la incorporación de nuevos motores más ligeros y eficientes.

 

 

 

El diseño, que muestra un aspecto bastante más atlético y deportivo, está inspirado en el Opel Monza Concept del año 2013, con cortos voladizos, mayor anchura y menor altura total de la carrocería. No sólo ha crecido el espacio interior en las plazas posteriores, también el acceso mejora por el diseño de las puertas, no tan puntiagudas como antes en su extremo y algo más altas. En materia tecnológica también aporta nuevas soluciones mecánicas, mejoras en procesos productivos, multitud de ayudas a la conducción y sistemas de seguridad, así como avanzados sistemas de conectividad. De esta forma, Opel quiere que su nuevo buque insignia constituya una alternativa real a los modelos premium, dado su tamaño, calidad y precio.

 

 

 

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Opel Insignia Grand Sport: desaparece el 4 puertas

Es la nueva denominación elegida para la variante de cinco puertas, ya que en esta generación se prescinde de la carrocería de cuatro, aunque sí habrá Sports Tourer y, seguramente, una variante Country Tourer después. El incremento de tamaño de la nueva edición le sitúa por encima de modelos como el Volkswagen Passat, Ford Mondeo o Skoda Superb y muy cerca de competidores del segmento E, como el BMW Serie 5, Mercedes Clase E o Audi A6. Dispone de nuevos motores de gasolina más ligeros y eficientes, con una gama inicial de motores que contempla versiones de cuatro cilindros con potencias comprendidas entre 140 y 250 CV en gasolina y de 110 a 170 CV en Diesel.

 

 

 

Hemos tenido la oportunidad de probar el nuevo motor de gasolina 1.5 de 165 CV que, básicamente es una evolución del anterior 1.4 turbo, asociado a una nueva caja de cambios manual de seis relaciones, con menos fricción entre piñones, así como el 2.0 T de 250 CV, que si bien mantiene intactas las cifras de potencia y par de la anterior edición, promete unas cifras de consumo mejores. En este caso, se encuentra asociado a una innovadora caja automática con convertidor de par, de ocho relaciones y levas en el volante. Se muestra muy suave y eficaz, disponiendo además de una configuración de reglaje deportiva.

 

 

 

Esta versión, la más potente de la gama, está asociada a una transmisión integral sin Haldex, incorporando ahora un sistema con dos embragues acoplables, capaces de enviar diferente par a cada rueda, a modo de diferencial trasero. En este caso, la suspensión posterior se ve modificada ligeramente, montando un sistema independiente multilink de cinco brazos en vez de cuatro, que llevan las versiones de tracción delantera.

 

 

 

 

 

Opel Insignia Grand Sport: buen comportamiento

Lo que más llama la atención del nuevo Insignia es su posición de conducción, mucho más baja que en el anterior modelo, con asiento de conductor con múltiples reglajes, banqueta larga y buen apoyo lateral, lo que transmite una sensación de conducción bastante más deportiva. Mandos e instrumentos están mejor colocados y se centralizan bastantes de ellos en la pantalla configurable de grandes dimensiones. La información se concentra en dos partes, digital y analógica, si bien en las variantes de validación pudimos ver dos tipos de cuadros, uno analógico muy sencillo para el 1.5 y otro más sofisticado, con parte digital, para el 2.0 T, que además incluía Head Up Display.

 

 

 

La misma sensación que tuvimos con el Astra de nueva generación respecto al anterior la hemos tenido ahora con el Insignia. Comparado con el anterior transmite mayor confianza, se nota bastante más ligero, con menos inercias en los apoyos fuertes cuando se abordan curvas enlazadas y, sobre todo, mucho más ágil.

 

 

 

 

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Opel Insignia Grand Sport: IntelliLux de 2ª generación

No ha sido fácil adaptar la nueva generación de luces led IntelliLux 2 en el Insignia, ya que el diseño de los grupos ópticos es más estrecho, muy similar al que mostraba el Monza Concept y, además, cuenta con más segmentos de led, concretamente, 16 por cada faro. Así, la precisión de la iluminación es muy superior y evita zonas de sombra. Con la luz de carretera activada y todos los segmentos encendidos, el conjunto es capaz de proporcionar un alcance de hasta 400 metros, con mayor anchura del haz.

 

 

 

Gracias a la precisión y resolución de la cámara situada en la parte superior del parabrisas permite ordenar operaciones de encendido o apagado de los segmentos en sólo 15 milisegundos. También ofrece mayor ángulo de iluminación en curva y una mayor intensidad de la luz, blanca y potente, que aumenta la seguridad y permite menor cansancio visual. Opel no ha comunicado el precio de la opción, pero asegura que será muy competitivo.

 

 

 

 

 

 

 

 

FUENTE: http://www.autopista.es/pruebas-de-coches/articulo/opel-insignia-grand-sport-2017-opiniones

 

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El Opel Insignia Grand Sport llegará al mercado en 2017. Aquí tienes las primeras fotos.

Opel Insignia Grand Sport 2017: a prueba la nueva berlina alemana

 

 

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